lunes, 22 de febrero de 2010

Mi historia, 1ª parte - Mis errores

Desde que tengo memoria siempre he sido un chico rellenito y poco activo. En muchas ocasiones seguí dietas, e incluso intenté hacer algo de ejercicio, pero sin la continuidad necesaria fracasé. Durante los últimos años la cosa fue a peor por culpa de mi mala alimentación y mi vida cada vez más sedentaria.

En Enero del 2009, tras las navidades, mi salud comenzó a resentirse de forma alarmante. Tras meses de trabajo en casa y comida basura, las piernas empezaban a dolerme (en concreto la espinilla) tras caminar unos cuantos metros. Ir a hacer la compra a paso rápido se había convertido en todo un suplicio y notaba como, cada vez, me faltaba más el aliento. Incluso en más de una ocasión llegué a sentir punzadas de dolor en el pecho al estar tumbado en el sofá. Y todo esto, a pesar de no beber ni fumar. No necesitaba un médico para saber que mi situación era crítica, así que me decidí a cambiarla dentro de mis posibilidades.

Aprovechando un cambio de casa, me propuse cambiar también toda aquella situación. Sin una báscula en casa, y con miedo de descubrir la terrible verdad en una farmacia, me decidí a hacer dieta y salir a correr. Ahora se bien que todo aquello fue un error. En mi batalla personal, solo logré levantarme temprano para correr en una ocasión. Me había marcado un objetivo, una distancia a la que quería llegar aquella mañana, pero nunca llegué tan lejos. Antes de llegar ya me dolían un horror las piernas, y sentía los ojos de todo el mundo fijos en mi sufrimiento. El recorrido de vuelta fue agónico intentando andar a paso rápido, pero tras tomarme una vaso de agua con azúcar, me sentí satisfecho por unas horas. Nunca más volví a repetir esa experiencia...


También intenté una de esas dietas milagro, en este caso una dieta de 10 días, comiendo cada día una cosa concreta: un día de verduras, un día de fruta, un día de pollo, un día de frutas rojas... Ya la había hecho anteriormente y llegué a bajar 5Kg en una semana. Merecía la pena intentarlo, ¿no?

Tras todo ese sufrimiento inútil, perdí 2Kg y terminé con una buena depresión que me hizo ganar 4Kg más.

Un consejo: NUNCA sigáis dietas, y mucho menos dietas milagro. Más adelante hablaré de ellas y de todo el mal que pueden hacerte, pero por ahora baste decir que esas dietas solo sirven para perder algo de peso (poca grasa y mucho músculo) que terminas recuperando al finalizarla.

Estoy seguro de que mi historia es común a muchas personas, por lo que espero que este diario de mis experiencias, éxitos y fracasos, ayude a alguien más. Para ser sincero, mi intención es usar este diario como fuente de inspiración. Reflejar mis éxitos y fracasos, y con ello obtener fuerzas para continuar y luchar contra las tentaciones de cada día. Si además, mi experiencia, trucos y consejos le son útiles a más gente, podré decir que ha sido todo un éxito!!


Si tu también has comenzado dietas de esas que te prometen perder peso en unos días sin éxito, si tu también te has propuesto hacer ejercicio abandonando días más tarde, si tu también has mirado con incredulidad los anuncios de televisión que te prometen milagros deseando que fueran verdad... no pierdas la esperanza.


Yo he pasado por lo mismo, y tras mucho leer, investigar y fracasar, he descubierto como conseguirlo. No es un camino fácil, ni rápido, pero funciona.

0 comments:

Publicar un comentario